Las frutas y verduras son alimentos de origen vegetal. Su consumo es importante por el aporte de vitaminas, minerales y fibra, y porque ayuda a los niños a crecer y a reducir el riesgo de enfermedades como el estreñimiento, hipertensión o hipercolesterolemia, entre otros. Sin embargo, muchas veces, conseguir que los niños coman este tipo de alimentos se convierte en una auténtica batalla. Por ello, aquí os dejamos una pequeña guía de quince consejos sobre cómo hacer que los niños coman más fruta y verdura.
1. Comenzar a introducir las frutas y verduras cuanto antes. La aceptación de los nuevos alimentos es más fácil en los niños cuando tienen entre 2 y 4 años.
2. Comer en familia hace que los niños coman más fruta y verdura.
3. Ofrecer todo tipo de verduras y frutas en la mesa, y mostrar cómo los padres también las comen. Los padres son siempre los modelos de los hijos, e imitan lo que hacen.
4. Mostrar y ofrecer estos alimentos varias veces. Según varios estudios realizados, las preferencias alimenticias de los niños están fuertemente influenciadas por las veces que los padres sacan la comida a la mesa y por su perseverancia en volver a enseñar la comida que los niños rechazan. Pueden necesitar ver un alimento 15 veces, para desarrollar gusto por éste.
5. Si no les gusta un alimento, no forzar demasiado, pero enseñar que tienen que probarlo con al menos un bocado.
6. Dejar que los niños participen en la planificación de los menús y a la hora de hacer la compra o cocinar.
7. Utilizar una variedad de frutas y verduras. No ofrecer siempre las mismas.
8. Presentar los platos de forma divertida, con ingredientes coloridos y vistosos.
9. Cortar los alimentos de formas curiosas. Se pueden elaborar sándwiches vegetales con lechuga, tomate, zanahoria rallada…., con queso, jamón, atún, etc., colocados en canapés cortados en forma de triángulo o círculo. Le llamará más la atención que el típico sándwich cuadrado.
10. Añadir frutas y verduras a alimentos que le gusten al niño. Ejemplo: Añadir fruta al yogur o combinar fruta en los cereales, espaguetis con verduras partidas finas.
11. Añadir frutas y verduras cortadas o en puré a los platos de carne. Por ejemplo: lomo de cerdo con puré de manzana, pechuga de pavo con piña, pollo a la naranja o pimientos, flan de espinacas y gambas, espaguetis con champiñones y setas, arroz con verduras…
12. Utilizar puré de verduras para espesar sopas y añadir sabor.
13. Comenzar el día con frutas. Un vaso de zumo de fruta es una fácil opción, que le aportará energía, además de una cantidad alta de fibra, más vitaminas y minerales y nada de grasa.
14. Meter en la mochila fruta para los descansos, como una manzana, una naranja, una pera, un plátano o una bolsa de frutos secos o frutas desecadas.
15. Meter fruta en un tazón y colocarlo visible en el frigorífico.